Dr. Edgar Urquídez Bazúa

A la vanguardia en salud respiratoria

El neumólogo Edgar Urquídez Bazúa es un médico joven, originario de Culiacán, Sinaloa, quien desde muy temprana edad anheló convertirse en un especialista y seguir los pasos de su padre, el Dr. Miguel Ángel Urquídez, médico neurólogo pediatra, y de su madre, Ascensión Bazúa Beltrán, enfermera quirúrgica. Desde pequeño, se vio inmerso en el mundo de la salud y en un ambiente hospitalario. Se define personalmente como apasionado por la medicina, servicial y familiar.

Como especialista, procura estar a la vanguardia y en constante actualización.

Recientemente, asistió al Congreso Latinoamericano de Medicina Respiratoria, con sede en Santiago de Chile, y al Congreso Europeo de Medicina Respiratoria, en Viena, Austria. Actualmente, es presidente de la sociedad médica del Grupo Angeles Culiacán y jefe de neumología y del servicio de inhaloterapia de dicho hospital. Además, cuenta con su laboratorio de fisiología respiratoria, “Respira Culiacán”, dentro de Hospital Angeles, y es investigador de enfermedades respiratorias dentro de su centro de investigación. El doctor es experto en el tratamiento de enfermedades respiratorias y, junto con su equipo de trabajo, cuenta con la experiencia y la tecnología necesarias para llegar a un diagnóstico preciso y brindar el tratamiento adecuado para cualquier enfermedad respiratoria.

¿Qué te motivó a especializarte en neumología? Antes de ser neumólogo, estudié dos años de medicina interna en el Hospital Civil de Culiacán. Durante esa experiencia, me di cuenta de la importancia y necesidad que tiene el aparato respiratorio en la salud, especialmente porque en la ciudad no había mucho equipo, conocimientos ni aparatos especializados para su tratamiento. Fue en ese momento cuando me propuse especializarme en neumología, con el propósito de traer a mi ciudad toda la tecnología e infraestructura necesarias para ayudar a mi comunidad.

¿Cuáles son las enfermedades respiratorias más comunes que ves en tu práctica? El aparato respiratorio es uno de los órganos que más contacto tiene con el medio ambiente, además de la piel. Cuando respiramos, movemos aproximadamente 9,000 litros de aire al día, es por ello por lo que hay un sinfín de enfermedades respiratorias. Estas van desde el COVID, entre las más frecuentes se encuentran el EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), el asma, enfermedades infecciosas, la fibrosis pulmonar, el cáncer de pulmón, que es uno de los más mortales, y la tuberculosis. Es impresionante la variedad de enfermedades respiratorias que hay; por eso, mantenernos a la vanguardia nos ayuda a enfrentarlas de manera más efectiva.

¿Cuáles son los mayores retos que enfrentas en tu especialidad? Mi objetivo es que la gente pueda respirar. Para mí, es un reto ver a un paciente con asma, EPOC, COVID o neumonía y, de la mano de Dios, ayudarlo a recuperar su capacidad respiratoria, algo tan básico y vital. Una pregunta que les puedo hacer es: ¿ustedes han sentido la falta de aire? Esto es algo muy importante. Un reto personal es mantenerme a la vanguardia, estar actualizado y contar con las herramientas más sofisticadas y el conocimiento adecuado para llevar a cabo una neumología que esté al nivel de cualquier parte del mundo.

¿Cómo impacta la prevención en la calidad de vida de los pacientes? Definitivamente, hablar de prevención es un tema que se ha perdido en nuestro país. La prevención es lo más importante para evitar complicaciones futuras y mejorar la calidad de vida en el contexto de las enfermedades respiratorias.

¿Hay algún avance reciente en tu especialidad que te entusiasme? Afortunadamente, en mi especialidad hay avances día a día. En nuestra ciudad, actualmente contamos con un equipo muy sofisticado de inhaloterapia y equipos de funcionamiento pulmonar. Además, tenemos el primer laboratorio de fisiología respiratoria del noroeste del país. Nos mantenemos a la vanguardia en todos los tratamientos y en lo necesario para establecer diagnósticos y tratamientos adecuados y certeros para cualquier enfermedad respiratoria.

¿Cómo te mantienes actualizado con los avances en tu campo? La medicina se encuentra en constante cambio, por lo que me mantengo actualizado en los avances a través de plataformas como artículos médicos, asistiendo a congresos importantes e internacionales sobre medicina respiratoria, y colaborando con la Sociedad Mexicana de Neumología y Cirugía de Tórax, de la cual soy parte. En esta sociedad, mantenemos sesiones académicas de manera frecuente, más de dos al mes. Asimismo, llevo una estrecha relación con mi alma mater, el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, del cual nunca me he desvinculado. Allí recibo información, adiestramiento y novedades sobre la medicina en nuestro país y en el mundo.

¿Qué consejo le darías a alguien que está considerando seguir una carrera en tu especialidad? El consejo sería, primeramente, que sienta amor y pasión por la medicina respiratoria, y que luche por mantenerse a la vanguardia que esta especialidad demanda.