La manteca de karité es un producto de belleza natural que no debe faltar en el hogar ya que es tan útil y versátil que nos puede ayudar en cualquier ocasión. Para que te des una idea, es perfecto para aliviar los labios resecos, ayuda a sanar una raspadura, elimina el frizz del cabello o las puntas resecas y muchas cosas más.
Desde hace siglos se ha utilizado el fruto del árbol de karité en África. Cada pueblo realiza diferentes elaboraciones y tienen distintas recetas usadas a lo largo de su historia, generalmente guisando la pulpa junto con la cáscara.
Algunos de los beneficios, pues en realidad son bastantes, existen los siguientes:
· Es rica en vitaminas A y E, las cuales ayudan a equilibrar, hidratar y calmar la piel.
· Es un excelente regenerador celular que puede ser aplicado en cualquier parte del cuerpo.
· Contiene vitamina F que ayuda a revitalizar el cabello dañado.
· Su uso también en las uñas ayuda a mejorar su brillo y prevenir posibles roturas.
· Posee propiedades antiinflamatorias capaces de aliviar el dolor debido a la artritis y el reumatismo.
· Excelente como aceite de masaje.
· Es muy recomendado para deportistas, gracias a que aporta un extra de elasticidad a la piel y es recomendable tanto antes como después del ejercicio, ya que ayudará al músculo a recuperarse de una forma más rápida eliminando toxinas y consiguiendo un mejor drenaje.
· La manteca de karité también es comestible y es utilizada en la preparación de muchos alimentos.
· Muy recomendada durante el embarazo o la lactancia, ya que previene la posible y común aparición de estrías o también la posible formación de grietas en el pecho.