Pintar la casa es, sin duda, una reforma de diez. No sólo limpias la vista de las paredes –que, con el uso, van acumulando roces, rayaduras e incluso algún garabato si hay peques en casa–, sino que, además, con solo cambiar el color, tu casa parecerá otra. Sigue estos consejos que te harán lograr un mejor aspecto de una manera sencilla.

Antes de comenzar, asegúrate de resguardar muebles, suelo y todo lo que se te pueda ensuciar cuando pintes. Utiliza una tela de lona gruesa y no utilices plásticos ya que impedirán que la pintura se seque más rápido.

•Quita los enchufes o interruptores eléctricos, cubre las lámparas o quitarlas si te es posible. Cubre con cinta de carrocero (marcos de puertas y ventanas, zócalos, etc.). Retira la cinta antes que la pintura este seca, te resultará mucho más cómodo y no te generará desperfectos.

•Repasa todas paredes antes de comenzar a pintar, buscando imperfecciones, grietas o agujeros, arréglalos utilizando productos adecuados y lija la pared, para disponer de una superficie completamente lisa.

•Limpia las paredes. Si las paredes están limpias, la pintura se fijará mejor. Mezcla agua tibia con lavavajillas y limpia las paredes de arriba abajo con una esponja, deja secar las paredes antes de empezar a pintar.

•Ten una buena iluminación. Podrás observar las partes que no se hayan tapado bien de pintura y ver otros errores que hayas cometido y también podrás evaluar mejor el color que elegiste. Pinta en el momento del día que haya más luz natural.

•No pintes en días muy calurosos o húmedos. Abre las ventanas para que la superficie seque rápido y para eliminar el fuerte olor de la pintura.

•Compra una pintura de buena calidad y elige una marca que puedas encontrar después en el mercado. Es conveniente guardar una muestra de pintura por si te surge algún imprevisto.

•Elige el color idóneo para cada ambiente de la casa. Piensa el efecto que quieres crear en cada estancia de la casa y que conjugue con los accesorios de la habitación. Los colores claros son recomendables para espacio pequeños con poca luminosidad y los colores más oscuros para espacios más grandes y luminosos.

•Pinta un trozo de la pared y obsérvala un par de de días para apreciar el tono a medida que cambian las condiciones lumínicas del día (con luz natural o ya sea por la noche).

•Escoge materiales de buena calidad para pintar. Pregunta en tu tienda de pintura cuáles son las mejores brochas o rodillos, cubrirán mejor la superficie que tengas que pintar y lograrás ahorrar en pintura y a la vez  tendrás un mejor terminado.

•No utilices demasiada pintura. Usa poca y déjala secar, y si es necesario añade más capas.

Gastando poco dinero, poniendo un poco de empeño, y con estos sencillos consejos para pintar tu casa que te damos, lograrás que tu casa quede perfecta y como soñaste.

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