Los años y los acontecimientos de la vida van dejando huella en la piel de la cara. Para matizar y minimizar las arrugas se pueden aprovechar algunos tesoros vegetales. Elegir productos naturales, mucho más afines a la piel que los basados en sustancias sintéticas, permite mantener una piel madura, bella y sana durante más tiempo.
No se trata de hacer milagros sino de encontrar ingredientes eficaces capaces de despertar el poder autocurativo de la piel. Las arrugas son pliegues superficiales que aparecen cuando la piel pierde elasticidad e hidratación, y se hace más delgada y rugosa.
Este proceso se debe a que la capa externa (capa córnea) se vuelve más gruesa y rígida, y a que las glándulas sebáceas disminuyen en número y funcionalidad. Para prevenir su aparición se pueden emplear cosméticos que hidraten y nutran la piel, que activen la secreción sebácea, que estimulen la regeneración de la piel mediante la replicación celular y la síntesis de proteínas (lo que inhibe, además, el proceso de endurecimiento o queratinización de la piel), y que capten y eliminen los radicales libres que oxidan y destruyen la piel.
Para ello la naturaleza brinda múltiples principios activos:
Lo ideal es comenzar a emplear este tipo de productos a partir de los treinta años. Las pieles secas requieren atención antes que las grasas –que presentan menos arrugas– y mayores cuidados. Las cremas deben aplicarse sobre una piel limpia y tonificada, y tras el sérum, en caso de emplearlo.
En el contorno de los ojos y de los labios se forman líneas de expresión como resultado de repetir algunos gestos. Con el tiempo, estos pliegues se convierten en arrugas, ya que la piel de esta zona es muy delicada. Para tratarla existen productos específicos muy hidratantes y nutritivos.
No existe la crema ideal que cuente con todos los ingredientes antiedad, pero se pueden alternar diferentes productos para buscar el equilibrio.
Conviene evitar derivados del petróleo como siliconas y parafinas, que al taponar los poros de la piel impiden su adecuada oxigenación.
Tampoco es aconsejable abusar de los productos tensores de la cara conocidos como flash, que acaban alterando la elasticidad de la piel. Además, es mejor evitar ingredientes tóxicos, peligrosos o sospechosos como colorantes o conservantes del tipo parabenes o fenoxietanol.
Tercera parte de la serie: de la admiración por las estrellas a la divulgación de…
Es el título de una gran pedagoga francesa, Francoise Dolto; y es que es verdad,…
¡Impulsa lo hace de nuevo!, en esta ocasión trae el confort de unas vacaciones permanentes…
El restaurante-bar El Guayabo famoso por sus deliciosos pollos y bebidas, funge como un entrañable…
Seguramente Sael Arakc Maldonado Elías te ha sacado alguna carcajada con sus entretenidos videos, pero…
Bricia Palmira López García es una sinaloense con mucha pasión por lo que hace y…